«PONGA UN VANGUARD EN SU VIDA»
Directivos de transición
20 de abril de 2015
Casi el 24% de los gallegos que cotizan a la Seguridad Social son trabajadores autónomos. Este dinamismo emprendedor queda patente en las estadísticas del Ministerio de Empleo, que muestran un crecimiento de más de 300 altas al mes.
Casi el 24% de los gallegos que cotizan a la Seguridad Social son trabajadores autónomos. Este dinamismo emprendedor queda patente en las estadísticas del Ministerio de Empleo, que muestran un crecimiento de más de 300 altas al mes.
Las organizaciones de autónomos atribuyen este crecimiento a las medidas impulsadas por el Gobierno de España para apoyar a los trabajadores por cuenta propia: la tarifa plana de 50 euros de cotización a la Seguridad Social durante los seis primeros meses de actividad y la posibilidad de la capitalización del desempleo para iniciar un negocio, y se atreven a vaticinar que en un plazo de diez años uno de cada tres ocupados será autónomo.
¡No te asustes! Mi intención no es hablarte de la política del gobierno sino de un nuevo servicio de management al que se están apuntando muchos ex directivos y muchas empresas y que está contribuyendo al crecimiento del número de autónomos en España: el interim management o dirección por transición.
¿Pero qué es un directivo de transición?
En ocasiones, los ejecutivos de una empresa no tienen la suficiente experiencia para gestionar situaciones de cambio, o simplemente no disponen del tiempo necesario pues deben atender a sus responsabilidades del día a día.
El interim management se puede definir como la contratación temporal de un ejecutivo con experiencia demostrada para gestionar un periodo de transición, una situación de crisis o un proceso de cambio en una organización. Esta provisión de servicios de management está muy extendida en los países anglosajones y en España va ganando adeptos poco a poco.
¿En qué se diferencia un directivo de transición de un consultor?
Como decía aquel chiste, un consultor es alguien que aparece sin que le llamemos, nos dice lo que ya sabemos y además pretende cobrarnos por ello. Por eso las capacidades del interim manager van más allá de las de un consultor. Es imprescindible que tenga experiencia como directivo, que haya liderado equipos de trabajo y que se implique con el resultado final del proyecto. De hecho, una parte relevante de los honorarios de un interim manager están vinculados a los resultados.
¿Cuáles son las ventajas de contratar un interim manager? Estas son en mi opinión las más relevantes:
– Solvencia: Incorporamos a la empresa a un profesional con experiencia contrastada.
– Temporalidad: Se le vincula sólo durante la realización del encargo profesional.
– Efectividad: El interim manager trabaja por objetivos, lo que conlleva un gran compromiso e implicación con el proyecto empresarial.
– Eficiencia: La experiencia del profesional le permite actuar con agilidad y flexibilidad en las tareas.
– Complementariedad: Se integra en el equipo directivo de la empresa, aumentando su valor.
– Independencia: Su carácter de externo no le hace reo de la cultura y «vicios» de la empresa, lo que le permite tomar decisiones justas y objetivas.
No lo dudes y, como decía aquel famoso anuncio de televisores Vanguard, «ponga un directivo de transición en su vida».
Andrés Alonso Seisdedos
Socio director Bexmanagement.es