DE HÉROE A VILLANO
Una retirada a tiempo es una victoria
Rindámonos a la evidencia: a los españoles nos encanta crear héroes y disfrutamos todavía …
Rindámonos a la evidencia: a los españoles nos encanta crear héroes y disfrutamos todavía más convirtiéndolos en villanos.
La historia reciente está llena de ejemplos de personajes que han pasado de héroes a villanos. A todos nos vienen a la cabeza los nombres de algunos de los directivos de las extintas cajas de ahorro, algunos de ellos nombrados hijos predilectos de esta o aquella ciudad, deportistas de élite que cometieron algún error en el momento menos oportuno, grandes empresarios a los que una inesperada crisis borró del mapa empresarial e incluso podemos añadir a esta lista algún político de los considerados “pata negra”.
Aunque no es lo habitual, Teresa Romero, personaje público de las últimas semanas, hizo el recorrido inverso: primero fue villano por no haber respetado supuestamente los protocolos y más tarde héroe por haber superado el ébola.
Sin duda, la actitud y comportamiento de algunos personajes famosos contribuye a que nos encarguemos de convertirlos en villanos.
Llegados a este punto y ciñéndonos al ámbito de la gestión empresarial, ¿qué comportamiento hemos de seguir como empresarios y directivos para no convertirnos en villanos? Se me ocurren algunas pautas que convendría tener en cuenta:
1.- Alguien me dijo una vez, “la persona hace al puesto y no el puesto a la persona”. En este punto es importante diferenciar entre valores y principios. En cuanto a los valores, éstos son de carácter personal, cada cual tiene los suyos. Sin embargo, los principios son universales. Estamos hablando de la honradez, la justicia, el respeto y la humildad. Sólo actuarás con integridad si tus valores están alineados con estos principios.
2.- Controla tu soberbia o te impedirá conocer tus debilidades y errores para corregirlos.
3.- No pierdas la perspectiva. Convierte todos tus éxitos, premios y reconocimientos en un estímulo para seguir mejorando y no los utilices para alimentar tu autocomplacencia y tu ego.
4.- Una retirada a tiempo es una victoria. Todo tiene un principio y un fin y es muy importante saber cuándo llega la hora de hacerse a un lado y dejar paso a los que vienen detrás.
Y ten siempre presente que al igual que tus éxitos, tus fracasos van a ser también un espectáculo público.
Andrés Alonso Seisdedos
Socio director Bexmanagement.es