ENTREVISTA EN ATLÁNTICO DIARIO TELEVISIÓN A NUESTRO SOCIO DIRECTOR
Andrés Alonso Seisdedos, consultor y experto en estrategia empresarial
«Es bueno que la empresa se deje ayudar por alguien externo que haga las preguntas incómodas»
El vigués Andrés Alonso Seisdedos, socio de la consultora Improven, cuenta con una dilatada experiencia en el campo de la asesoría empresarial, muy importante en esta etapa clave de para afrontar la salida de la crisis y el cambio de ciclo que está viviendo la economía. Es experto en la figura del directivo interino exportada desde Galicia al resto de España.
Aquí puedes ver la entrevista completa en Atlántico TV.
¿Qué receta a las empresas para afrontar la pospandemia?
No hay una receta única porque no hay situaciones únicas. Nos encontramos con empresas a las que la pandemia les ha ido bien, están vendiendo más y ganando más dinero y empresas a las que en algunos casos la pandemia las cogió con una situación delicada y otras que de la noche a la mañana les ha cambiado su modelo de negocio y se han tenido que reinventar. Para los que crecen y les va mejor también es necesario que hagan cambios a nivel organizativo. Para el otro grupo recomiendo que se paren y reflexionen y se dejen ayudar porque en el mundo de la empresa no existen los milagros.
Usted es experto en la figura del directivo interino ‘interim manager’. ¿Qué relevancia tiene en este momento de crisis?
Lo importante es dejarse ayudar por alguien de fuera, que pueda cuestionar el status quo de la empres, que haga preguntas incómodas y que tenga una visión más fresca que pueda ayudar a poner orden en un momento determinado. Ahí hay dos figuras, la consultoría tradicional para dar un diagnóstico, definir una hoja de ruta y ayudar en los cambios y por otra parte el interim manager que está bastante de moda en España en la actualidad.
¿En qué consiste?
El directivo de transición o directivo interino es una persona con mucha experiencia y bagaje profesional que se contrata para una situación de crecimiento, nuevos negocios o mercados o para una situación compleja de dificultades. Es un perfil muy ejecutivo que desde que aterriza en la empresa ya está tomando decisiones y pone solución a los problemas que puedan existir y es una figura que no compromete mucho al empresario porque suele ser para proyectos acotados en el tiempo y vinculados a una serie de objetivos.
¿Tiene buena acogida en Vigo?
Cada vez más. Tiene mucha implantación en el mundo anglosajón, en Europa también y desde hace unos 8 años existe una asociación en España para promover esta figura y tanto el presidente como el vicepresidente, que soy yo, somos gallegos. Él de Coruña y yo de Vigo, por lo que diría que esta figura la hemos exportado desde Galicia al resto de España.
¿Cuántos hay?
Unos 300 en la asociación y seguramente habrá entre 150 y 200 que ejercen la actividad de manera regular aunque no están asociadas.
Se contratan de manera temporal. ¿Cómo cree que encajará esto con la reforma laboral?
No afecta porque no son contratos laborales sino mercantiles en la inmensa mayoría de los casos, son muy acotados en el tiempo.
Está participando en el programa “Futuro de los negocios” del Círculo de Empresarios de Galicia en Vigo. ¿En qué consiste?
Acercar al gran público determinados actores que tienen un papel relevante en este momento por estar al frente de empresas representativas y en muchos casos líderes en sus sectores.
Hablamos de empresas referentes que son ejemplo para pymes y emprendedores. ¿Tienen mucha responsabilidad?
Creo que todas las empresas tienen que ser responsables a la hora de estar a la altura de sus clientes, accionistas y de empleados y las grandes, además, tienen un papel tractor y de líderes.
¿Qué le transmite el tejido empresarial sobre la situación actual?
El denominador común es de preocupación. Cuando se decretó el estado de alarma el Gobierno reaccionó bien articulando los ERTE y los ICO para insuflar oxígeno para que las empresas pudieran seguir funcionando, pero dos años después las empresas están muy endeudadas y muchas no lograron llegar a los niveles de facturación de la prepandemia y existe mucha preocupación porque los créditos hay que devolverlos. Es complejo y se da la tormenta perfecta con la subida de la energía y las materias primas que impacta en los márgenes de las compañías y es una dificultad más que hay que gestionar.
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